José Amell – El escenario vibró de emoción y nostalgia cuando la icónica banda venezolana Zapato 3 hizo su esperado regreso a Valencia en una noche llena de rock y energía desbordante. El Wynwood Park se convirtió en el punto de encuentro perfecto para los fanáticos, quienes esperaban ansiosos el regreso de sus ídolos después de 11 largos años de ausencia en la ciudad.
Carlos Segura, la inconfundible voz líder de la banda, deleitó al público con su poderosa interpretación y su presencia en el escenario. Junto a sus talentosos compañeros, Jaime Verdaguer, Alvaro Segura, Dario Adamés y Fernando Batoni, Zapato 3 ofreció una actuación impecable, recordando por qué son considerados una de las bandas más emblemáticas del rock venezolano.
El setlist del concierto fue una verdadera joya para los fanáticos, quienes se emocionaron al escuchar los himnos más icónicos de Zapato 3. Temas como «Vampiros», «Amo las estrellas», «Amor de hierro», «Uñas asesinas» y «El amor es sangre» resonaron en el aire, transportando a todos los presentes a momentos inolvidables de la historia musical de la banda.
Sin embargo, fue durante la interpretación de «Elefantes marinos» cuando la emotividad alcanzó su punto máximo. Este tema, el último grabado con el fallecido baterista Diego Márquez, fue dedicado en honor a su gran amigo. Segura compartió unas palabras conmovedoras y el público se unió en un momento de profundo dolor y emoción, recordando la trascendencia de Márquez en la música de Zapato 3.
El bajista Fernando Batoni también dejó su huella en el concierto con su estilo único y su impecable destreza musical. Ataviado con un atuendo que evocaba al famoso personaje Drácula de Bram Stoker, Batoni se convirtió en una figura enigmática en el escenario, cautivando la atención de todos los presentes.
«Pantaletas Negras», uno de los mayores éxitos de la banda, se convirtió en un himno aclamado por la multitud. Carlos Segura, con sus movimientos peculiares y su carismática puesta en escena, logró transportar al público a otra dimensión, creando una experiencia surrealista y electrificante.
En resumen, la noche fue mágica y nostálgica para los fans de Zapato 3 en Valencia. La banda demostró por qué su música ha resistido el paso del tiempo y sigue siendo tan relevante en la escena musical venezolana. El regreso de Zapato 3 fue un verdadero triunfo, una celebración para aquellos que han seguido su carrera y una invitación para una nueva generación de fanáticos a descubrir su inigualable sonido. Sin duda, el concierto en el Wynwood Park quedará grabado en la memoria de todos como una experiencia inolvidable.