Con los Juegos Olímpicos de París 2024 como escenario, Armand Duplantis volvió a hacer historia. Esta vez, no sólo con una medalla dorada en salto con garrocha, sino además por haber establecido otro récord mundial, de 6,25 metros.
Desde el momento en que el sueco elevó la vara a esa altura, el estadio se paralizó. Claro, no era para menos: Mondo ya había marcado un nuevo récord olímpico al superar los 6,10 metros en su anteúltimo intento, superando así los 6,03 metros establecidos por el brasileño Thiago Braz en 2016. La expectativa era tal que hasta se postergó la ceremonia de medallas de los 100 metros llanos, para ver si el atleta lograba la gesta que se propuso. Su primer intento, sin embargo, fue nulo, luego de apoyarse con las manos a pesar de haber logrado sortear la vara con el resto de su cuerpo.
En el segundo intento, esta vez, llegó luego de la premiación en los 100 metros llanos. Aun así, otra vez fue nulo -esta vez, por tocar la vara con las manos y los pies- y parecía que el récord no sería logrado. En la tercera oportunidad, sin embargo, Duplantis hizo historia y superó por 0,01 centímetros la marca que había establecido él mismo el 20 de abril pasado, en Xiamen. Inmediatamente, tras caer sobre las colchonetas, corrió a celebrar su hito con Renaud Lavillenie -ganador de la medalla dorada en salto con garrocha en Londres 2012 y uno de los referentes de la disciplina-, y su familia.
Así, con el logro alcanzado, Duplantis hizo sonar la campana que anunciaba el nuevo récord, además de posar con el resultado de su hito, uno que alcanzó después de haber quedado compitiendo solo, ya que sus compañeros de podio Sam Kendricks (Estados Unidos) y Emmanouil Karalis (Grecia) quedaron en el camino con 5,95 y 5,90 metros, respectivamente.
Los récords no son algo nuevo para Duplantis, quien hace rato es su propia competencia. Llegó a París como el dueño de la mejor marca mundial y se va mejorando ese hito. El mejor ejemplo de lo monstruosa de la marca que el sueco presenta es que, de los 30 restantes competidores en la disciplina para estos Juegos Olímpicos, solo cinco llegaron superando los seis metros. Ahora, su segunda medalla olímpica (ya la había ganado en Tokio 2020) se sumará a una vitrina que ya incluye dos Mundiales (2022 y 2023) al aire libre y dos en pista cubierta (2022 y 2024), tres mundiales europeos al aire libre y uno bajo techo.